GUÍA DE COMPRA: cómo elegir ROBOTS LIMPIACRISTALES en [year]

El robot limpiador de cristales, robot limpia ventanas o limpiacristales automático son, igual que los robots limpiadores de suelos, máquinas automáticas con una función muy específica en casa, en este caso una máquina limpiacristales, la cual tiene las ventajas de descargarnos de una tarea tan pesada y para algunos dura o engorrosa que realizará de manera autónoma, ayudado por un software, sensores que detectan el fin de la superficie, un sistema de succión que le permite la adhesión al cristal, un conjunto de cepillos y paños para eliminar la suciedad y las manchas, y dos depósitos habitualmente, uno para el líquido limpiador y otro para el agua del aclarado, así como también son capaces de limpiar superficies acristaladas elevadas, muy elevadas o poco accesibles, además de poder limpiar otros tipos de superficies como espejos, escaparates, mamparas, puertas de cristal y, otras superficies en algunos modelos, como azulejos, soliendo valer para todo tipo de superficies lisas. Se suelen manejar con un mando a distancia o con tu móvil (smartphone con su propia aplicación) y suelen contar con varios programas de limpieza que puedes elegir.

Como siempre, para elegir tu robot para limpiar cristales, tu máquina para limpiar cristales, tienes que definir exactamente las funciones para lo que lo vas usar: ¿sólo un uso doméstico o vas a usarlo en tu negocio o trabajo para que limpie puertas de cristal, escaparates o superficies acristaladas muy altas? ¿Diferentes tipos de superficies que no son cristales (todo tipo de superficies lisas, madera, azulejos)? En este último caso vas a necesitar un robot limpia vidrios más potente, que limpien más rápido, y con más autonomía en los depósitos, así como siempre tienes que definir cuánto estás dispuesto a gastar en él para moverte en el rango de posibilidades que haya para ese dinero o pensar en ahorrar un poco más o financiarte para ello

• AUTONOMÍA: tienes que fijarte tanto en la autonomía de uso como en la de los depósitos (para recargarlos). Hay robots limpiadores de cristales automáticos que van con una batería (robot limpiacristales sin cable de alimentación directa, pero suelen llevar uno que va a una batería externa, por lo que hay dos dispositivos unidos por una cable) o los hay que van conectados a la red eléctrica. Los conectados a la red no tendrán problemas de tiempo, pero los de batería tienen autonomías que van de 30 a 60 minutos, y a parte fíjate en el tiempo en el que tarda de vaciarse el depósito. Lo normal es que den para un uso completo cuando tienen batería, pero si van a la red el tiempo que cueste vaciarse es importante para que lo tengas en cuenta para su recarga. Actualmente los que la tecnología que se está imponiendo es la que va directamente a la red eléctrica, por lo que en la autonomía que te tienes que fijar es en la de los depósitos habitualmente.
• POTENCIA: marca el nivel de limpieza que tiene el robot, ya que nos indica el nivel de fuerza con el que absorberá la suciedad. 70-90W es lo normal pero lo hay de más.
• VELOCIDAD DE LIMPIEZA: lo normal es que se encuentre entre los 4-5 minutos por metro cuadrado en las gamas medias, pero fíjate si tienes que limpiar grandes superficies si necesitas irte a modelos más caros que lo hagan más rápido. Estúdialo según tus necesidades.
• PROGRAMAS DE USO/LIMPIEZA: dependiendo del modelo lo eliges desde el mando o smartphone con una app de la marca como hemos indicado antes. Suelen tener programas de limpieza y secado, de recorrido para el trabajo, programas para mover el robot manualmente con el mando o aplicación y función para superficies especiales (en los modelos que la tengan), como azulejos.

• ACCESORIOS: entre ellos podemos encontrar mangos extensibles, paños de microfibra, paños o cepillos especiales para ciertas superficies (paredes de ducha, mamparas, azulejos, madera), etc., siempre dependerá del modelo y las funciones y características que tenga. Pueden ser muy útiles y modelos del mismo precio pueden tener funciones y accesorios diferentes. Fíjate bien.
• FORMA: los hay que acaban en forma redondeada y en forma cuadrada, teniendo un mejor acabado en las esquinas los segundos, apuran más.
• SISTEMA DE SEGURIDAD ANTICAÍDAS: en los robots limpia vidrios nos encontramos que los hay que toda su seguridad depende del cable de alimentación a la red o a la batería exterior que tienen mientras que otros tienen un segundo cable o cuerda de seguridad que lo protegerá en caso de fallo. Sus sistemas de succión, de adhesión al cristal deben ser suficientes, pero no están de más estos sistemas. Así mismo hay algunos que cuentan con una batería auxiliar en el propio cuerpo del robot que le da una autonomía de unos 15-30 minutos aproximadamente si se quedara sin alimentación, aguantando en esa superficie ese tiempo antes de que lo podamos rescatar.

• Cable: mirar que el cable sea suficientemente largo para las funciones para que lo deseas. Para ello entra en el producto y, si hace falta y no te lo dice en la descripción directamente, mira la ficha técnica.
• Marcas en las ventanas: algunos modelos dejan marcas en las ventanas donde se detienen, esto pasa más en los modelos más antiguos, o no llegan bien a los bordes. Esto va mejorando día a día según como mejoran los productos y avanza la tecnología. Los cuadrados llegan mejor a los bordes.
• Ruido: Mira bien su ficha técnica o sus características entrando en el enlace del producto, algunos pueden resultar molestos, como el uso de una aspiradora normal o de un robot de limpieza de suelo, por lo que sólo podrás usarlo en determinadas horas del día.
• Ten en cuenta que, a la hora de usarlo, tienes que estar pendiente de ellos para, cuando acaban con la hoja de una ventana, pasarlo a la siguiente zona de trabajo por lo que no son completamente autónomos, aunque te ahorren trabajo.